Se corresponde a unas de las principales cavidades del sector Piqueras Blanca. Su desarrollo es eminentemente vertical. Tras un abrigo de modestas dimensiones la cavidad se desfonda en un pozo de 74 m que nos sitúa en otros dos de 6 y 9 m respectivamente. Volviendo a la gran vertical y a medio camino de la misma encontramos un meandro que tras otra red de pozos nos devuelve de nuevo a la vertical. El desarrollo total asciende a 170 m y un desnivel absoluto de 88 m. La exploración y topografía corrió a cargo de un equipo del grupo STD de Madrid en 1980.